La Clave del Ministerio: La Oración en la Vida del Pastor
Pastor Ezequiel Salazar
"Si Jehová no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican..." (Salmo 127:1)
El pastor Ezequiel Salazar inicia su enseñanza con una reflexión sobre la importancia de la dependencia en Dios en el ministerio pastoral. A través del Salmo 127 y Lucas 11:1, nos recuerda que si intentamos construir el ministerio sin Dios, todo nuestro esfuerzo será en vano.
La Oración: El Fundamento del Ministerio
Uno de los puntos centrales de esta enseñanza es la necesidad de la oración en la vida del pastor. No basta con conocer técnicas ministeriales o estrategias de liderazgo; sin una vida de oración, el ministerio se vuelve una carga pesada y sin fruto.
Reflexión Personal sobre la Oración
El pastor Salazar comparte su experiencia personal, después de décadas en el ministerio, al darse cuenta de que si bien oraba, no podía considerarse un "hombre de oración". Esta realización lo llevó a transformar su iglesia en una congregación que ora fervientemente, lo que ha producido un cambio radical en la vida espiritual de sus miembros.
La Oración Como Ejercicio Espiritual
Jesús enseñó a la mujer samaritana que Dios es Espíritu y que los verdaderos adoradores lo adoran en espíritu y en verdad (Juan 4:23-24). La oración es un ejercicio espiritual que nos conecta con Dios y nos permite ver Su obra en nuestras vidas y ministerios.
La Oración en Diferentes Áreas del Ministerio
1. La Oración en la Vida Personal
La calidad de nuestra vida de oración refleja cuánto dependemos de Dios.
Un pastor no puede liderar espiritualmente si él mismo no está fortalecido en la oración.
Debemos pedirle a Dios que examine nuestro corazón (Salmo 139:23-24).
2. La Oración en el Matrimonio
Orar con la esposa fortalece la relación matrimonial.
La oración conjunta evita conflictos y genera unidad espiritual.
1 Pedro 3:7 nos advierte que el trato injusto con la esposa puede estorbar nuestras oraciones.
3. La Oración por los Hijos
Job oraba y sacrificaba por sus hijos "por si acaso habían pecado" (Job 1:5).
El diablo ataca a nuestros hijos porque sabe que es la forma más efectiva de lastimarnos.
Debemos interceder constantemente por su vida espiritual y protección.
4. La Oración en la Iglesia
La iglesia primitiva estaba llena del Espíritu porque era una iglesia de oración (Hechos 4:31).
Pablo constantemente oraba por las iglesias que fundaba (Efesios 1:16, Filipenses 1:3-4).
Debemos orar por nuestros líderes, miembros y nuevos convertidos.
El Secreto del Ministerio Exitoso
El pastor Salazar enfatiza que el éxito en el ministerio no se mide en números, sino en la presencia de Dios en la iglesia. Muchos predicadores dependen de su elocuencia, pero sin oración, sus mensajes carecen de poder. Jeremías 23:22 nos dice que si los profetas hubieran estado en la presencia de Dios, habrían hecho volver al pueblo de su mal camino.
Conclusión
Jesús enseñó a sus discípulos a orar porque sabía que sin oración, su ministerio sería ineficaz. Como pastores, no podemos permitirnos el lujo de vivir sin una vida profunda de oración.
La oración no es un ritual, es una necesidad. El llamado hoy es a regresar a la búsqueda genuina de Dios en oración. Hagamos nuestra la petición de los discípulos en Lucas 11:1: "Señor, enséñanos a orar".
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