El Peligro de la Ociosidad

Pastor Alejandro Córdova

Vivimos en una generación donde la ociosidad se ha convertido en un problema grave. La Biblia nos advierte sobre los peligros del ocio y cómo puede llevarnos a una vida espiritualmente infructuosa. En este mensaje, el Pastor Alejandro Córdova nos exhorta a reflexionar sobre este tema, basado en Ezequiel 16:49:

"He aquí que esta fue la maldad de Sodoma tu hermana: soberbia, saciedad de pan y abundancia de ociosidad tuvieron ella y sus hijas, y no fortalecieron la mano del afligido y del menesteroso."

1. La Ociosidad es Pecado

Muchos consideran el ocio como algo inofensivo o incluso merecido, pero la Palabra de Dios lo señala como un pecado. En Ezequiel 16:49, Dios menciona la ociosidad como una de las razones por las que Sodoma fue destruida. El pecado no comienza de la nada; la ociosidad es un terreno fértil para la tentación y la corrupción.

Evidencia Bíblica

• Hechos 17:5: La Biblia asocia la ociosidad con hombres malvados que se prestaron para alborotar la ciudad.

• 1 Timoteo 5:13: Se menciona que las viudas jóvenes, al no tener ocupación, caían en chismes y murmuraciones.

Dios nos llama a estar activos en Su obra y a no desperdiciar el tiempo que Él nos ha dado.

2. La Ociosidad Lleva a la Pereza

La Biblia enseña que la ociosidad y la pereza están estrechamente relacionadas. Cuando una persona permite que la ociosidad gobierne su vida, pronto cae en la negligencia y deja de cumplir con sus responsabilidades.

Advertencias Bíblicas

• 1 Tesalonicenses 5:14: "Os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos."

• 2 Tesalonicenses 3:6-10: Se ordena apartarse de los hermanos desordenados y se establece una regla clara: "Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma."

• Proverbios 6:6-11: Se exhorta al perezoso a aprender de la hormiga, que trabaja sin necesidad de supervisión.

Un cristiano diligente es un testimonio para el mundo, mientras que un cristiano perezoso es una piedra de tropiezo.

3. La Ociosidad Conduce al Pecado

Uno de los ejemplos más claros de los peligros del ocio se encuentra en la historia del rey David. En 2 Samuel 11:1-4, David se quedó en Jerusalén cuando los reyes debían salir a la guerra. Su tiempo de ociosidad lo llevó a cometer adulterio con Betsabé y luego a planear el asesinato de Urías.

El ocio nos hace vulnerables. Si no estamos ocupados en las cosas de Dios, el enemigo encontrará la manera de llenar ese vacío con pecado.

4. Cómo Vencer la Ociosidad

Dios nos da las herramientas para vencer la ociosidad y vivir una vida plena y fructífera en Su servicio.

4.1 Llena tu tiempo con actividades edificantes

• Efesios 5:16: "Aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos."

• Dedica tiempo a la oración, la lectura de la Biblia y el servicio en la iglesia.

4.2 Trabaja con diligencia

• Efesios 4:28: "El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad."

• Trabajar no es una maldición, sino una bendición establecida por Dios desde la creación.

4.3 Enfócate en la Gran Comisión

• Mateo 28:19-20: "Id, y haced discípulos a todas las naciones..."

• Invierte tu tiempo en ganar almas, discipular y ayudar a otros en su caminar con Cristo.

Conclusión

El ocio es peligroso y puede llevarnos al pecado, la pereza y la destrucción espiritual. Dios nos llama a ser diligentes y a ocuparnos en Su obra. Reflexionemos sobre nuestro uso del tiempo y hagamos los cambios necesarios para agradar a Dios.

Reflexión Final

• ¿Estoy usando mi tiempo para la gloria de Dios?

• ¿Tengo una agenda llena de actividades edificantes?

• ¿Estoy dispuesto a renunciar a la ociosidad para servir mejor al Señor?

Recordemos que un día daremos cuentas a Dios por cómo administramos nuestro tiempo. Que podamos decir como el apóstol Pablo: "He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe." (2 Timoteo 4:7)