Lo que Dios no ve
Este sermón se predicó en la Iglesia Bautista Monte Hebrón, el domingo por la mañana, 16 de octubre del 2022 por el Pastor Jonathan Ashcraft.
El Pastor predica acerca de lo que Dios no ve. Dios no ve lo que tienes. Él ve lo que haces con lo que tienes. A Dios no le impresiona cuánto tienes. El honra a los que le dan lo todo lo que tienen.
Este es un mensaje con doctrina bautista, fundamental, independiente enfocado en ayudarte a conocer a Dios, tener un fervor por alcanzar las almas para Cristo y vivir una vida separada del mundo. ¡Esperamos que sea de bendición!
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Texto Bíblico
35 Enseñando Jesús en el templo, decía: ¿Cómo dicen los escribas que el Cristo es hijo de David? 36 Porque el mismo David dijo por el Espíritu Santo: Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi diestra, Hasta que ponga tus enemigos por estrado de tus pies. 37 David mismo le llama Señor; ¿cómo, pues, es su hijo? Y gran multitud del pueblo le oía de buena gana.
38 Y les decía en su doctrina: Guardaos de los escribas, que gustan de andar con largas ropas, y aman las salutaciones en las plazas, 39 y las primeras sillas en las sinagogas, y los primeros asientos en las cenas; 40 que devoran las casas de las viudas, y por pretexto hacen largas oraciones. Estos recibirán mayor condenación.
41 Estando Jesús sentado delante del arca de la ofrenda, miraba cómo el pueblo echaba dinero en el arca; y muchos ricos echaban mucho. 42 Y vino una viuda pobre, y echó dos blancas, o sea un cuadrante. 43 Entonces llamando a sus discípulos, les dijo: De cierto os digo que esta viuda pobre echó más que todos los que han echado en el arca; 44 porque todos han echado de lo que les sobra; pero ésta, de su pobreza echó todo lo que tenía, todo su sustento.
Introducción
Nadie dudaba de quién estaba hablando. Este fue un lugar público y los escribas estaban allí cuando Cristo predicó este sermón.
¡Esta es predicación durísima! Nunca pienses que yo o tu pastor o cualquier predicador que tú conoces predica más duro que Cristo predicaría si este fuera su propio púlpito. Vivimos en una generación muy sensible, pero la verdad es que necesitamos predicación dura y directa.
Este fue el trasfondo en que Cristo hizo ejemplo de una pobre viuda, metiendo sal en la herida. Cristo estaba sentado junto al lugar donde la gente estaba dejando sus ofrendas. Los historiadores nos dice que en ese tiempo había 13 cajas para las ofrendas. Cada una representaba un diferente tipo de ofrenda. Por ejemplo, nuestros sobres de ofrenda tienen cinco diferentes espacios en que puede designar su ofrenda.
Todo su dinero era en forma de monedas, así que cuando ponían su ofrenda, hacía un cierto ruido. A algunos les gustaba hacer mucho ruido cuando ponían su dinero. Algunos se portaban con “humildad” al poner su dinero.
Cristo estaba observando lo que estaba sucediendo. “Estando Jesús sentado delante del arca de la ofrenda, miraba cómo el pueblo echaba dinero en el arca; y muchos ricos echaban mucho.”
Cristo observaba el espectáculo. En el templo había gente rica, de clase media y pobres, y todos estaban bienvenidos. Y ¡así debe ser en toda iglesia! TODOS deben estar bienvenidos porque son personas hechas a la imagen de Dios.
Entonces vino esta pobre viuda con sus dos “blancas”. La “blanca” fue la moneda de menos valor de todas. Haga de cuenta una moneda de cinco centavos. No hicieron mucho ruido cuando cayeron en el recipiente de la ofrenda.
Esto atrajo la atención de Cristo porque él sabía todo acerca de ella. Sabía cuánto estaba dando. Entonces Jesús llamó a sus discípulos y les explicó cómo ella había dado más que cualquier otra persona en todo el templo. “Y vino una viuda pobre, y echó dos blancas, o sea un cuadrante. 43 Entonces llamando a sus discípulos, les dijo: De cierto os digo que esta viuda pobre echó más que todos los que han echado en el arca; porque todos han echado de lo que les sobra; pero ésta, de su pobreza echó todo lo que tenía, todo su sustento.”
Cristo hizo esto para ENSEÑAR a los discípulos, para ENCOMENDAR a la viuda, y para AVERGONZAR a los escribas.
Esta historia tiene una gran verdad que quiero que veamos.
Lo que tú haces con lo que tienes es todo lo que Dios ve.
El hombre mira para entender. Dios mira y recuerda. Si tú tienes la idea de que no puedes ser usado por Dios porque no tienes nada que ofrecerle, este sermón es para ti. Deja que este pensamiento penetre tu mente.
Lo que tú haces con lo que tienes es todo lo que Dios ve.
Dios es Dios justo. Siempre trata a todos con justicia. Deuteronomio 32:4 “El es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud; Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto.” Dios NUNCA maltrata a NADIE. Una de las grandes verdades que debe animarnos a todos es que Dios no hace acepción de personas.
En esta historia, Cristo estaba humillando a los orgullosos y levantando a los humildes. ¿Cuántos predicadores podrían hacer esto en nuestros días? Más vale que valoremos lo mismo a los pobres y a los ricos. Son IGUALES en los ojos de Dios. Siendo que Dios todo lo conoce, puede ser justo con todo mundo.
Lo que haces con lo que tienes es todo lo que Dios ve.
Dios no está buscando al que todo lo tiene. Está buscando al que está dispuesto a darle todo lo que tiene. No es lo que TIENES que impresiona a Dios. Es lo que HACES con lo que tienes.
Moisés fue humillado en el desierto de Madián. En su tiempo, Moisés fue un hombre poderosísimo.
Hechos 7:22 Dice que Moisés fue enseñado en la sabiduría de los egipcios, poderoso en hecho y en palabra.
Cuando se encontró con Dios 40 años después, no podría ni hablar claramente… Éxodo 4:10 “Entonces dijo Moisés a Jehová: ¡Ay, Señor! nunca he sido hombre de fácil palabra, ni antes, ni desde que tú hablas a tu siervo; porque soy tardo en el habla y torpe de lengua.”
Moisés tenía muy poco que ofrecer a Dios en términos humanos.
¿Qué tenía Moisés? Una vara - un palo… Exodo 4:1: “Entonces Moisés respondió diciendo: He aquí que ellos no me creerán, ni oirán mi voz; porque dirán: No te ha aparecido Jehová. Y Jehová dijo: ¿Qué es eso que tienes en tu mano? Y él respondió: Una vara.”
Moisés no tenía un ejército.
Moisés no tenía un arma.
Moisés no tenía un compañero humano.
Moisés no tenía un “plan B”
¡Solo tenía una vara - un palo seco!
Y Dios le dijo: “¡Eso es todo lo que necesitas!”
¡Que enormes lecciones Egipto va a aprender acerca de lo que el Dios vivo y verdadero puede hacer con un hombre totalmente rendido a Él!
Dios no necesita un ejército. Dios usó un ángel para destruir un ejército de 185,000 hombres… 2 Reyes 19:35 “Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel de Jehová, y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil; y cuando se levantaron por la mañana, he aquí que todo era cuerpos de muertos.”
Dios no necesita grandes números. Gedeón tenía demasiados soldados. 22,000 eran demasiados. Solo necesitaba a los 300.
¡DIOS USARÁ EXACTAMENTE LO QUE TÚ TIENES!
¿Tú tienes una lengua? ¡Dios puede usarla!
¿Tú tienes manos? ¡Dios puede usarlas!
¿Tú tienes un corazón? ¡Dios puede usarlo!
¿Tienes una mente? ¡Dios puede usarlo!
¿Qué clase de vara tenía Moisés? No sé, pero se la dio a Dios para que la usara. No sé si fue de mesquite, roble, álamo, olmo, huisache - Eso no es lo importante. Lo que importa es que la dispuso a Dios para que la usara.
Dios + una vara = la libertad de una nación entera.
Dios + lo que tú tienes = a todo lo que Dios quiere. Lo que haces con lo que tienes es todo lo que Dios ve.
¡Vé al campo, corta un palo, y dile a Dios: “Solo tengo este palo, pero es tuyo y yo soy tuyo: úsame!”
El único a quien Dios no usa es el que es demasiado orgulloso para usar solo lo que tiene.
Daniel 4:37 “Ahora yo Nabucodonosor alabo, engrandezco y glorifico al Rey del cielo, porque todas sus obras son verdaderas, y sus caminos justos; y él puede humillar a los que andan con soberbia.”
Santiago 4:6 “Pero él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.”
1 Pedro 5:5 “Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad; porque: Dios resiste a los soberbios, Y da gracia a los humildes.”
¡Pierde tu orgullo, y date cuenta de que el honor más grande de todo el mundo es ser usado por Dios!
Moisés sacrificó el esplendor de Egipto para ser usado por Dios.
Hebreos 11:24-26 “Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, 25 escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado, 26 teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenía puesta la mirada en el galardón.“
Algunos leen esto y se preguntan ¿Qué clase de necio no quisiera servir a Dios?
Dios solo ve lo que haces con lo que tienes. Y lo que DIOS ve es lo que es importante..
¿Qué tienes tú que Dios podría usar?
Jonás usó su testimonio malo para advertir a una gran ciudad a arrepentirse o ser destruida. Y una ciudad entera se arrepintió. Si tú tienes un testimonio malo, úsalo para decirles a otros cómo ellos terminarán si no se arrepienten.
Demasiados cristianos luchan para ser usados por Dios porque se alejaron de Dios y piensan que todos los demás están pensando en lo que hicieron.
Tal vez esa fue una de las motivaciones de Cristo en señalar la ofrenda de la viuda de las dos blancas. Cristo quería que los fariseos supieran que a Él le importaba más lo que uno hace con lo que tiene que lo que tiene.
Dios puede hacer mas con uno que tiene poco que esta dispuesto a dárselo todo a Dios que con uno que tiene mucho que esta dispuesto a darle ALGO a Dios.
Ahora, usted tiene algo que Dios puede usar — un talento, una disposición, un gozo por servir a la gente — ¡ALGO! A lo mejor no es mucho. A lo mejor no es impresionante. Quizás para algunos luzca ordinario, pero Dios puede usarlo grandemente si estas dispuesto a entregarle TODO.
Dios no usa a los que le dan parte.
Dios no usa a los que le dan algo. Le dijo a los apóstoles, venid en pos de mí y os haré pescadores de hombre. “Ven sígueme y haré algo de ti.” Dice que le dejar sus redes y le siguieron. Dejaron sus trabajos. Dejaron su empleo. Dejaron su profesión. Dejaron TODO.
A algunos, Dios les llama para que dejen todo y le sigan. Algunos son llamados a ser obreros de tiempo completo. Los demás son llamados a ser Cristianos de tiempo completo. ¿Cuál es la diferencia?
Los obreros de tiempo completo — pastores, misioneros, evangelistas — viven del ministerio y los Cristianos de tiempo completo apoyan el ministerio.
Si no haz sido llamado a dejar tu profesión y tu empleo para servir a Dios como pastor, misionero o evangelista, yo creo que Dios espera que hagas todo lo que puedas para apoyar al ministerio — diezmo, ofrendas, ganar almas, voluntario en la iglesia.
TODO CRISTIANO debería de estar dispuesto a decir: “Señor todo lo que soy y todo lo que tengo es tuyo. Mi cuerpo es tuyo, mi mente es tuya, mi corazón es tuyo, mi voluntad es tuya, mis hijos son tuyos, mis ingresos son tuyos, mis bienes son tuyo. Haz con ellos lo que tu quieras.”
Es exactamente lo que hizo esta viuda y lo que no pudieron hacer los soberbios. Ella dio de su necesidad. Ellos dieron de su abundancia.
Ella dio a pesar de la necesidad. Ellos dieron para no tener necesidad.
Ella dio porque era correcto. Ellos dieron porque estaba de moda.
Ella dio porque Dios lo merecía. Ellos dieron porque pensaba que merecían reconocimiento.
Ella dio para alabar a Dios. Ellos dieron para ser alabados.
Ella dio para mostrarle a Dios lo que ella pensaba de Él. Ellos dieron para ver qué pensaban otros de ellos.
Ella dio a pesar de ser vista. Ellos dieron para ser vistos.
Yo batallo con el orgullo. Creo que es algo con lo que voy a batallar toda mi vida. Me preocupa lo que la gente piensa de mí. Quiero caerle bien a la gente. Y si tú fueras honesto dirías lo mismo.
¿Sabes qué quiere Dios de mí? Lo que tengo en mi mano. Yo no soy nada especial. ¿Sabes que soy? Un pecador salvo por la gracia de Dios y por la gracia de Dios, el acepta lo que yo tengo que dar y lo usa.
El está dispuesto a usar lo que tú le des. Él puede hacer mucho con poco.
Él puede convertir 5 panes y 2 peces en un banquete de mariscos para 5000 hombres.
Él puede convertir 5 piedras de rio en balas anti gigantes.
El puede convertir un garrafón de bonafont en el jugo de uva mas delicioso.
Dale lo que tienes a Dios. Otra cosa: No le des nada al Diablo. No le des nada al mundo. No desperdicies lo que sí tienes en lo que no conviene.
Por poco que tengas que darle a Dios, si se lo das, Él lo puede convertir en mucho. Por mucho que tengas en este mundo, si lo inviertes en este mundo, será pérdida.
Dios es misericordioso. Cuando le damos a Él lo que tenemos el lo multiplica y nos da más de lo que teníamos.
Lucas 6:38 ”Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo…”
Esa es una buena fórmula. Dale tu tiempo a Dios y el te dará más tiempo.
Dale tu corazón a Dios con gozo y el dará mas gozo a tu corazón.
Dale tus talentos a Dios y Dios te dará mas talento.
Dale tu fuerza a Dios y Dios te dará mas fuerza.
Dale tu vida a Dios y Dios te dará más vida.
Es la ley de dar y recibir.
No le puedes dar más a Dios de lo que Dios puede darte a ti.
Y lo mejor de todo es que Dios mide lo que le damos, no de acuerdo a lo que otros dan, no de acuerdo a lo que otros tiene — Dios mide lo que le damos de acuerdo a lo que tenemos en la mano.